martes, 12 de febrero de 2008

III NIVEL Y MAESTRÍA REIKI SISTEMA USUI TRADICIONAL

Hola, Amigos/as:

Ayer, día 11 de febrero de 2008, hice el III nivel y la Maestría y ¡¡fue muy hermoso!!.

Éramos 4 personas: mis dos Maestros Reiki (son matrimonio, Marcos me inició en el nivel I y Merche en el II), Lola (que ya era maestra Reiki, pero se hacía una resintonización) y yo.

El ambiente era increíble; se respiraba una PAZ enorme. Yo estaba nervioso porque aunque estaba muy seguro de querer hacerlo (¡¡lo necesitaba!!), en el fondo no sabía con certeza si estaría preparado o no. Mi evolución personal, no sé por qué, ha sido muy rápida, pero os aseguro que únicamente el Universo y uno mismo son capaces de sentir cuándo llega tu momento. Yo tuve que meditar mucho para saber quién era el que quería hacer el III nivel y la maestría, si Vicente el exterior (ego) o Vicente (mi Ser Interior). Cuando recibí la respuesta lo tuve claro definitivamente.

En una mesita con velas encendidas e imágenes de Budas, Vírgenes y mi amado Jesús de Nazaret, pusimos fotos de seres queridos. Yo puse dos fotos: una en la que estoy de pequeño junto a mi hermana, y otra donde aparecemos mis hijos, mi mujer y yo.

Comenzamos con un ejercicio de relajación que nos transportó a un encuentro con nuestro niño interior y que fue maravilloso. (Yo me llevo bien con mi niño interior). Después hicimos un ejercicio llamado el “vuelo del ángel”, en el que se supone que vuelas realmente, unidas las auras de tu maestro y la tuya. Sinceramente no tuve ninguna sensación especial, ni visualicé nada. (No soy de visualizar).

Y después el maravilloso regalo de la iniciación. Cuando me introdujeron el Dai Ko Myo en el chakra corona, comencé a ver una especie de campana azul celeste que me cubría, empezando en la cabeza y llegaba hasta los hombros. Y después comencé a ver bolas o pompas de color morado que entraban en mí a raudales.

Me sentí pleno, feliz, lleno de paz y de amor, ¡¡fue precioso!!.

Después mis Maestros me estuvieron haciendo un poco de Reiki, sobre el 4º chakra, las rodillas y los tobillos.

Posteriormente, le hicieron la resintonización a Lola y yo me quedé tumbado y relajado.

Cuando todo terminó, mis Maestros me explicaron lo que me tenían que explicar; los aspectos más formales del III nivel y la maestría, y charlamos durante mucho tiempo, de nuestras experiencias, sensaciones, percepciones...

Y hasta aquí lo que puedo contar. Evidentemente hay cosas que quedan para uno mismo y su intimidad; sé que lo entendéis.

Hoy estoy muy, muy feliz y, a la vez, siento una gran responsabilidad hacia mí mismo, hacia los demás seres y hacia el mundo, en general. Sé que ahora empieza una etapa preciosa, de mucho trabajo personal e intentaré aprovecharla.

Espero que os haya gustado mi experiencia, aunque no fue nada extraordinario desde el punto de vista fenomenológico, pero sí fue extraordinario para mí. Un regalo y un recuerdo imborrable para el resto de mi vida.

Un Sincero Abrazo.

Vicente